Inicio Salud y psicología Los bomberos que evitan suicidios
España   Catalunia

Los bomberos que evitan suicidios

Premio a la ITS, entidad que forma a bomberos de Madrid en intervenciones ante tentativas de suicidio

El suicidio es una realidad que nos golpea día a día. Las familias, los profesionales y los medios de comunicación nos alertan del aumento de estos casos, muchos de ellos evitables con una prevención y detección tempranas, y un cuidado de la salud mental.

Los bomberos en Madrid atienden más de 300 tentativas de suicidio al año  

Las tentativas de suicidio son situaciones de emergencia, a las que muchas veces el cuerpo de bomberos debe acudir; en especial, es habitual su intervención en el caso de personas con riesgo de precipitación, es decir, que utilizan puertas, puentes, balcones o ventanas para acometer el suicidio arrojándose al vacío desde o a través de ellos. De hecho, tan solo en Madrid atienden alrededor de 350 tentativas de suicidio cada año.

Sin embargo, la falta de formación sobre cómo proceder ante casos de suicidio es una de las carencias detectadas en la formación de bomberos. Esta laguna de conocimientos fue lo que llevó a Sergio Tubío a fundar la Unidad de Intervención en Tentativas de Suicidio (ITS) del cuerpo de bomberos de Madrid, la cual coordina en la actualidad y en la que también es formador: «Surgió de una necesidad. La primera semilla tristemente salió después de tener que asistir a la recuperación del cadáver de un niño de 16 años. A partir de ese día empecé a investigar sobre la conducta suicida y a adaptar todo lo que iba leyendo a la metodología de bomberos», nos confiesa.

La ITS, que forma a bomberos en la intervención en riesgo de suicidio, recibe el primer premio a la mejor iniciativa con impacto social

Se trata de un proyecto pionero a nivel mundial, que lleva cinco años en funcionamiento y que este mes ha sido galardonado con el primer premio por la Fundación Mapfre y reconocido como Mejor Proyecto o Iniciativa por su Impacto Social.

La ITS tiene como objetivo formar al cuerpo de bomberos en la atención a tentativas de suicidio, y para ello se enfoca en proporcionarles conocimientos sobre la conducta suicida, su complejidad, mitos, estadísticas y aspectos legales en su ámbito territorial y laboral; enseñarles a actuar de manera segura y coordinada en este tipo de intervenciones; y facilitarles adiestramiento en primeros auxilios psicológicos para atender a las víctimas que padecen una crisis suicida. Todo ello con el fin de que adquieran la capacidad de reacción y las nociones técnicas suficientes para poder contener a la víctima de la manera más eficiente, en función del escenario, y realizar el rescate en diferentes contextos.

Este tipo de intervenciones son particulares por su complejidad. A diferencia de otras emergencias, ante una tentativa suicida el cuerpo de bomberos trata de intervenir lo mínimo posible, puesto que el objetivo es hacer que la persona se aleje de la zona de riesgo, para lo cual es necesaria una escucha activa. De esta forma, los bomberos invitan a la persona a reflexionar y valorar su decisión. Tubío nos recuerda que en estos casos «hay que entender que nos enfrentamos a una situación en la que la persona ha alcanzado un grado máximo de sufrimiento en el que se plantea la muerte como opción para dejar de sufrir. Realmente no quieren morir, sino tratar de calmar ese dolor y sufrimiento. Por ello, la principal función será establecer el contacto y que la persona sepa que queremos ayudarla, no convencerla de nada o cogerla por sorpresa. Nuestro objetivo es que en ese momento de crisis valore una alternativa que no sea el suicidio».

Ante una operación de salvamento de este tipo tener la máxima información sobre el contexto y la persona es vital, pues les permite elaborar un retrato de la situación y decidir si plantean una estrategia ofensiva, que consiste en contener a la persona, o una defensiva, que implica el uso de la palabra como herramienta para persuadir y hacerla recapacitar.

Si bien las cifras de tentativas de suicidio son preocupantes, entidades como la ITS ayudan a reducir el número de suicidios consumados. La mala noticia es que en los últimos 4 años ha habido un 13 % más de suicidios, pero la buena es que el número de rescates con éxito realizados por Bomberos Madrid aumentó en un 107 %.

Fuente: Inèdit Agencia.

Sin Comentarios

Escribe un comentario

Tu correo electrónico no se publicará